Hiperhidrosis
La hiperhidrosis es la sudoración anormal y excesiva que no necesariamente está relacionada con el calor o el ejercicio. Puedes sudar tanto que se te empapa la ropa o gotea por tus manos.
Las causas de hiperhidrosis suelen ser principalmente estímulos térmicos y emocionales, que desencadenan la respuesta colinérgica (sistema nervioso simpático) de las glándulas sudoríparas ocasionando así ese exceso de sudoración.
La hiperhidrosis no es una enfermedad ni una patología grave, ni invalidante, ni siquiera contagiosa, pero es cierto que puede causar problemas de seguridad y confianza en quien la padece, así como entorpecer sus relaciones personales o trastornar la vida cotidiana de la persona.
La aplicación de toxina botulínica o bótox ha demostrado utilidad en la hiperhidrosis de axilas y palmas. Su mecanismo de acción consiste en un bloqueo de la transmisión nerviosa en la unión neuromuscular, cesando la producción de sudor entre el segundo y cuarto día después de la infiltración.
Las estadísticas de estudios de investigación publicados han demostrado que el tratamiento repetido con Botox es seguro y efectivo para la hiperhidrosis y consistentemente en mejoras significativas y duraderas en los síntomas, el funcionamiento diario y la calidad de vida de un paciente.